-
Arquitectos: KDF Arquitectura ; KDF Arquitectura
- Área: 450 m²
- Año: 2015
-
Fotografías:Niko Jacob – Emilio Arango, Lucho Mariño
-
Proveedores: Spradling México, Proquinal
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El restaurante actualiza la preparación y presentación de recetas y sabores característicos en la cocina colombiana. Su nombre, “La Principal”, se inspira en la costumbre de llamar así a la calle más importante y sobre la que se desarrolla toda la actividad económica y cultural de los pueblos tradicionales colombianos. El mayor reto de branding, fue elaborar una interpretación visual moderna que encajara con la propuesta gastronómica del restaurante y mantuviera la coherencia de los aspectos visuales y arquitectónicos.
Por ésta razón decidimos trabajar con formas que representaran el espíritu festivo de los colombianos y retomar imágenes, historias y mitos que han girado en torno a nuestra cocina. En términos espaciales, aprovechamos la arquitectura de la casa para recrear elementos estrechamente ligados a la cultura popular y a las regiones representativas de nuestra cocina
La casa es parte de un conjunto de bienes de interés cultural y está ubicada en el barrio Chapinero Alto (Bogotá – Colombia) un lugar estratégico, con alto impacto a nivel metropolitano. El proyecto se enfocó en eliminar lo que se había venido agregando a la construcción original, resaltar el estilo arquitectónico y reforzar la oferta gastronómica del restaurante: “actualizar nuestras tradiciones al contexto”. Buscamos resaltar los componentes característicos de este tipo de casas (como el zaguán, el patio, las circulaciones de servicio, etc.) para definir “regiones”, asociadas a los orígenes de las recetas. Retomamos elementos tradicionales como piedra maciza, lajas de río recortadas, muros en tierra, ladrillos artesanales y celosías, uso estructural de madera, adoquines en ladrillo, enchapes artesanales, tapia pisada y los colores propios de la colonia.
La zonificación del proyecto está marcada por los pisos de una manera bastante sutil: en el acceso una madera rústica de zapán, en el hall de circulación usamos baldosas artesanales en colores diseñados especialmente para el proyecto, en la zona de estadía central instalamos un adoquín en dos colores, inspirados en motivos precolombinos y en el patio recuperamos un ladrillo modular existente.
El mobiliario es diseño de KdF Arquitectura y se desarrolló con ebanistas y ornamentadores locales. En las mesas empleamos superficies en listones de madera inspiradas en las canoas de nuestros pescadores y estructuras metálicas que se inspiran en las mecedoras de la costa, que mezclan el metal estructural y elementos lineales. Para el patio empleamos sillas en metal fundido, que evocan los primeros muebles industrializados, a las que adicionamos cojines. También empleamos piezas funcionales, traídas de diferentes épocas, para construir una atmósfera asociada a los mercados, pero bastante controlada. Desarrollamos las luminarias, también con proveedores locales, buscando un equilibrio entre elementos románticos y materiales industriales.